Bienvenida/o a la Asociación Yo No Renuncio que lucha por una conciliación real
Colabora Hazte socia/o

¿Qué quieres encontrar?

Deja tu historia Yo No Renuncio

¡Únete a la nueva acción de la Asociación Yo No Renuncio y sé parte del cambio que necesitamos! Tu participación es clave para llenar este muro de historias de conciliación y renuncia.

Mi historia Yo No Renuncio

‘El Muro de la Conciliación’ es un espacio para alzar la voz, contar nuestras historias de renuncia y visibilizar todos los obstáculos que las mujeres nos encontramos en el camino de la conciliación cuando nos convertimos en madres.

Tenemos un objetivo, llenarlo con el mayor número de testimonios posibles para lograr un cambio social, para conseguir dar pasos hacia una conciliación real. Solo si alzamos la voz y sacamos a la luz cada una de nuestras historias podremos conseguirlo, ¿nos ayudas a construir este muro juntas?





el muro de la conciliacion
Ya son 1.330 historias de renuncia
  1. Os leo, me identifico y me animo a compartir lo que me está pasando en este momento. Trabajo en la Recepción de un hotel, me encanta mi trabajo y nunca me he planteado dejarlo. He pedido la conciliación familiar para que los días que trabajo entre semana (normalmente 3) pueda ir de 10 a 18 y poder llevar a mis hijos al cole. Desde ese momento he dejado de librar los fines de semana porque según mi Jefa, mujer y madre también, tiene que compensar a mis compañeros, veinteañeros sin hijos.
    Zuriñe
  2. Era autónoma y tenía un negocio al igual que mi marido tiene el suyo, después de tener a mi primer hijo lo cerré unos meses y al incorporarme la situación era insostenible, me tenía que poner un horario muy reducido para poder llevarlo y recogerlo de la guarde, anular citas semanas enteras y cerrar por que se ponía malo... Pero siempre yo, el negocio de mi marido no se vio perjudicado en nada. Con el segundo embarazo tomé la decisión de cerrar definitivamente.
    Judith
  3. Trabajo en pequeño comercio (clinica físio).Con la primera no modifique mi jornada ( turno partido). Cuando me volví a quedar embarazada, se llevan 17 meses, dije que no volvía a hacer eso. No ver a mis hijas en todo el día. Yo quería adaptarme el horario pero seguro con mi jornada. La respuesta de mi jefe fue: que me redujera la jornada o que yo vería, que él no podía pagar otra seg social para que otra persona me cubrirá por las tardes. Conseguí la adaptación pero reduciendo a medi
    Mónica
  4. Abogada por cuenta propia, es decir tengo menos derechos que una empleada de hogar, tuve que seguir haciendo frente a los pagos de colegiación y mutualidad durante todo un año aunque sin ingreso alguno, ya que con el bebé era imposible trabajar debido a la lactancia a demanda, preparación de escritos, asistir a los clientes, guardias, IMPOSIBLE, sumado a que el turno de oficio se paga con retraso. Las abogadas os defendemos¿para cuando se nos defenderá a nosotras, un colectivo feminizado?
    Themis
  5. Con 28 tuve mi primera hija y al volver al trabajo me pusieron mil trabas para darme una reducción. Con mi segunda hija dos años más tarde, tuve un mal embarazo y me tuve que coger una baja antes de lo previsto, no sentó bien y volver fue un desastre... con horarios de cierre que teniendo dos niñas pequeñas para mi era insoportable. Por lo que decidí renunciar, desde entonces solo he tenido trabajos temporales...ahora tengo una tercera hija y volver a la vida laboral me está resultado i
    Inma Fdez
  6. Soy sanitaria. En mi primer embarazo trabajé hasta la 36 en turnos rotarios porque de haber estado de baja por riesgo en el embarazado no me hubiesen renovado contrato,con el segundo hasta 35 porque consideraban mi puesto en hospitalización como compatible , di a luz en la 36. Tras reincorporarme me reduje la jordana, a los 6 meses desde dirección nos comunican ,a mi y a otras 79 personas, que nos modifican las condiciones de la reducción donde nos imponen un turno y nos reducen el sueldo.
    Ana Erica Sánchez
  7. Vivimos muy lejos de nuestras familias, estamos solos, por lo que cuando me incorporé de la baja tuve que cogerme reducción y apenas ver a mi marido, trabajamos en turnos encontrados para poder cuidar a nuestra hija, al principio lo intenté, pero cuando se ponía malita o cerraba la guarde, tenía que pedir permiso, y me resultaba insoportable, no dormía esa noche pensando en que tenía que subir OTRA VEZ a pedir salir antes, así que al final reducción,
    María
  8. Cuando me incorporè de mi baja de maternidad el compañero al que yo había formado y entró a sustituir mi maternidad se quedó con todas mis funciones. Me cambiaron de departamento y tuve que empezar de cero después de 6 años en la empresa. Me impidieron promocionar como me habían prometido y me fueron quitando responsabilidades. Me vi obligada a volver a demostrar mis capacidades como si nunca hubiese trabajado en la compañía antes. Fue muy doloroso.
    Almudena
  9. Cuando me quedé embarazada y se enteró la JEFA de departamento, me dijo textualmente "no te da vergüenza quedarte en estado con lo que hemos confiado en ti?! ". Hace 15 días que me he reincorporado y mi sorpresa es que me han cambiado de puesto d trabajo y he tenido que reducirme la jornada.
    Noelia
  10. Con 18 años me fui de casa con el que hoy es mi marido y padre de mis hijos. A los 23 y 25 años fui madre, madre que se dedicó en cuerpo y alma. Mi hijo diagnóstico de TEA+TDAH y mi hija TDAH. Yo a los 35, en crisis existencial, decido ponerme ha estudiar mi pasión en el sector sanitario. Trabajando fesrivos, fines de semana.. etc. Quiero estudiar enfermería, esa es mi meta, ser enfermera. Però la realidad es difícil!!
    CRISTINA LACÁMARA
  11. Tras 4 años con contratos anuales en un centro de formación profesional dirección consideró que no me podían renovar para el curso siguiente, puesto que mi hija nacería a principios de septiembre… actualmente de permiso de maternidad, a partir de enero en desempleo
    Ane
  12. Cuando me quedé embarazada renuncié a trabajar durante dos años para criar con presencia y tranquila. Decido voover al mundo laboral y cuando pido flexibilidad horaria para el proceso de adaptación mi jefe me dice "aquí hay muchas chicas con hijos y se buscan la vida" Cada vez que pido un permiso mi jefe hace que me sienta culpable y, lo que más me duele, mis compañeras (muchas madres) también.
    Elisabet
  13. Con el primero hice reducción de jornada. Mi marido es autónomo y no había manera de poder conciliar, por aquel entonces, entraba a las 8,30h, hasta las 14h y de 16h a 19h. No podía permitir no ver a mi hijo (quería un hijo, no un hermano). Con el segundo, vino la excedencia, no quería ni imaginar a mi bebé de 5 meses en una guarde. Y “por suerte” puedo permitirme seguir con la reducción. De otra manera, sería imposible criar a mis hijos. Cuento con poca ayuda externa (o nada).
    Belén
  14. Renunciar del todo no, pero reducirme la jornada y saber que no puedo ascender, preprararme para mejorar, no poder cambiar del trabajo por las limitaciones horarias ( me encargo 100x100 de la recogida del cole, extraescolares, etc), sí. Mi pareja tiene un trabajo que le pagan mejor que a mí, y, además, las horas extras también, a mi, nada de nada. Soy la que "puedo" faltar cuando el peque se pone malo, en fin. Me fastidia renunciar a mejorar por el hecho de querer cuidar a mi hijo.No e
    Carlota Moraleda
  15. En mi empresa siempre me han puesto trabas para conciliar con las terapias de mi hijo autista, y justo cuando estaba a punto de ascender, me quedé embarazada de mi segundo hijo. No solo no me ascendieron, sinó que ascendieron a una compañera que no estaba preparada y debía formarla yo misma para que asumiera el puesto que me hubiera tocado a mí, quedando yo a mi vuelta como su subordinada. Por quejarme se que debo buscar otras opciones porque ya nunca podré ascender.
    Patricia Real
  16. Antes de entrar en una gran constructora como ingeniera me dijeron "de broma" que si estaba embarazada o preembarazada (lo que sea eso) me darían los 45 días y a casa. Así que cuando quise tener hijos me fui a otra empresa en que sabía que iba a ganar menos dinero pero me iban a tratar mejor. Aunque los horarios en la obra son interminables y lo de conciliar una utopía
    Ana
  17. Después de tener a mi primer hijo, vino la pandemia y despidos en empresa. Soy abogada y con un niño pequeño es imposible trabajar por cuenta ajena. Tuve que buscar algo que me permitiera teletrabajar 100% para poder conciliar. Trabajo a gusto pero no es mi profesión ni a lo que me quiero dedicar siempre, tocará emprender si quiero volver a mí profesión, ya que con 34 años no quiero conformarme con lo que me toque porque sí.
    Carolina
  18. Cuando tuve a mi hijo hace llevaba en mi empresa 5 años super valorada, las reacciones a mi embarazo fueron "raras" y cuando volví de mi baja de maternidad ya no me daban trabajos de responsabilidad como hasta entonces y la relacion con mis jefes cambió. Me pedí la adaptación horaria y el maltrato hacía mí cada vez era más evidente. Denuncié pero acabé renunciando por mi estado psicologico. 2 años después he conseguido el trabajo de mis sueños y que me permite conciliar. Si se pue
    Alba

Página 51 de 74